Cómo elegir el color perfecto según tu piel y estación del año.
Elegir el vestido perfecto va mucho más allá del diseño. El color tiene el poder de iluminar tu rostro, resaltar tu mirada y dar vida a tu estilo.
En Boüret, creemos que la elegancia no solo se lleva puesta, se siente. Y parte de esa magia comienza con elegir el tono adecuado para ti.
Hoy te compartimos una guía sencilla (y poderosa) para encontrar el color que mejor te favorece según tu tono de piel y la estación del año en la que es la boda. Para que brilles, sin eclipsar a nadie, y te sientas tú misma.
¿Qué tono de piel tienes?
Antes de elegir colores, identifica si tu piel tiene subtono cálido, frío o neutro.
Un truco sencillo:
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Subtono frío: las venas de tu muñeca se ven azuladas, te favorece la plata.
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Subtono cálido: las venas se ven verdosas, te favorece el dorado.
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Subtono neutro: no hay una tendencia clara, ¡todo te queda bien con matices!
Colores para piel clara
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Frías: te iluminan los tonos empolvados, azul cielo, lavanda, rosa palo, menta, gris perla.
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Cálidas: opta por melocotón, coral, champagne, verde agua, mostaza suave.
Evita tonos demasiado apagados o cercanos al blanco si la boda es de día.
Colores para piel media (beige, dorada o tostada suave)
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Frías: fucsia, azul klein, malva, cereza, ciruela, verde jade.
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Cálidas: terracota, caldera, verde oliva, dorado viejo, teja, burdeos.
Estas pieles lucen espectaculares con colores intensos y contrastados.
Colores para piel morena o muy bronceada
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Frías: azul noche, violeta, rojo rubí, frambuesa.
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Cálidas: amarillo mostaza, cobre, esmeralda, coral fuerte, naranja quemado.
Qué colores elegir según la estación del año de la boda
Primavera
Luz, frescura y tonos suaves.
Rosa empolvado, verde menta, azul serenity, coral claro, champagne.
Verano
Brillos y tonos vibrantes.
Fucsia, rojo sandía, turquesa, lavanda, amarillo limón.
Otoño
Colores cálidos, tierra y sofisticación.
Caldera, burdeos, mostaza, verde botella, teja, cobre.
Invierno
Elegancia profunda y tonos joya.
Azul noche, ciruela, verde esmeralda, rojo rubí, gris humo, negro satén.
Evita los tonos demasiado oscuros (como negro o marrón chocolate) si la boda es de día.
Si dudas entre varios tonos, pruébate el vestido a la luz natural y observa tu rostro: ¿resalta tu mirada? ¿Tu piel se ve más luminosa?
Si es así… ese es tu color.
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